Bien.
Lo que te voy a contar a continuación será algo en lo que no dejarás de pensar los próximos días y que, probablemente, cambie lo que ahora crees sobre la búsqueda de embarazo y lo transforme en algo mucho más positivo y esperanzador.
Es una historia increíble y breve con grandes aprendizajes que vamos a ver aquí y ahora.
Agosto de 2024,
Rocío se levantó de la cama aquella mañana sintiendo que estaban pasando cosas en su cuerpo. Sensaciones que no le ocurrían normalmente. Y se ilusionaba…
Le dolían los pechos, se sentía hinchada, se notaba rara…
“Esta vez sí, creo que estoy embarazada”
Se lo decía a su pareja. Lo hablaban constantemente. Imaginaban cómo sería la vida con su nuevo bebé. La alegría que traería su llegada. Las ganas que tenían de enseñarle cosas y de cuidarle.
Llevaban 2 años intentándolo, y creía que esta era la buena.
Esta vez sí.
Ahora sí.
Pero entonces…
Le bajó la regla.
Otra vez.
Toda su ilusión se fue por el retrete. Literalmente.
De nuevo, otro fracaso.
El golpe fue durísimo.
Y ya no podían más.
Hasta ahora el médico sólo les había dicho que “no veía nada raro”, que lo siguieran intentando.
Pero esta estrategia claramente no estaba funcionando…
Así que esta vez se plantaron en la consulta en busca de soluciones. Otras alternativas.
Y el médico le sugirió empezar un proceso de FIV (reproducción asistida).
¿Hay algo malo en eso?
No. Estos procesos ayudan a muchísimas mujeres a conseguir su sueño de ser madres. En muchas ocasiones, suerte tenemos de ellos.
PERO, para mí, iniciar estos procesos SIN preparar el cuerpo previamente es una perdida innecesaria de tiempo y dinero.
Y ojo que esto no es mi opinión, lo he visto innumerables veces en consulta.
Si no preparas bien a tu cuerpo para el embarazo, disminuyes de forma significativa la probabilidades de éxito de cualquier tratamiento.
Y por desconocimiento, esto es justo lo que le pasó a Rocío.
Escucha.
Durante todo el tiempo que llevaban de búsqueda (2 años) no le habían dado ninguna pauta para mejorar su fertilidad más allá de unos suplementos básicos.
¿Y para la FIV?
Para la FIV tampoco hicieron nada.
Solamente le recetaron unas pastillas (que ni por asomo cubrían las necesidades nutricionales de su cuerpo) y le dijeron que empezara cuanto antes.
Así que Roció depositó todas sus esperanzas en este proceso y desembolsó los 6,000€ que vale el tratamiento, pero…
Sólo consiguió 1 óvulo
de calidad.
Lo fertilizaron y…
NO se implantó.
Le dijeron que había sido “mala suerte”, y le convencieron para hacer otra FIV el mes siguiente. Cuanto antes.
De nuevo, sin hacer nada más en paralelo…
¿El resultado?
Esta vez no consiguieron ningún óvulo de calidad.
“Fallaron” de nuevo.
En este punto, Rocío y su pareja ya estaban desesperados. Y pidieron explicaciones.
-¿Por qué nos está ocurriendo esto? ¿Qué estamos haciendo mal?
Entonces fue cuando les explicaron que los óvulos que le sacaban a Rocío no eran lo “suficientemente buenos”.
A lo que ella respondió:
-¿Y qué puedo hacer para mejorar esos óvulos?
Lo que le dijeron los médicos literalmente fue:
“Nada, no hay nada que hacer.
Puedes seguir probando más FIV, pero con pocas probabilidades de éxito.
O puedes…
Silencio sepulcral en la consulta.
Nudo en el estómago.
Presión en el pecho.
Ojos llorosos.
Nadie decía nada.
Así que se lo volvieron a repetir:
“Tienes baja reserva ovárica y tus óvulos no sirven.
La única opción que veo es hacer ovodonación.”
Imagina la situación.
Una mujer sana, de 36 años, que se cuida. Que lleva +2 años esforzándose para ser madre.
Y ahora le dicen que sus óvulos no sirven, que no hay nada que hacer.
Se fueron para casa hechos polvo. Ahogados en un mar de dudas.
-Queremos tener un bebé con los óvulos de otra mujer?
-Y si probamos otra FIV?
-Aunque… si no han funcionado las dos rondas previas, por qué debería funcionar la siguiente?
-Cuanto dinero más podemos perder?
Estaban atrapados, y la única opción que les daban era la ovodonación.
Hasta que…
Lo que viene ahora es muy bueno.
Rocío quería darse una última oportunidad antes de tirar la toalla definitivamente.
Buscando alternativas, se dio cuenta de que los médicos no le estaban ofreciendo todas las opciones posibles.
Y escarbando un poco más, dio con una información que cambió por completo su proceso de maternidad y que, cuando lo leas ahora, también puede cambiar el tuyo.
Atenta.
Como ya habrás escuchado muchas veces, la edad afecta a la fertilidad. Esto está más que demostrado por la ciencia, y es sentido común. Somos más fértiles a los 30 que a los 40.
Sin embargo, Rocío descubrió que las mujeres tenemos dos edades.
-¿Como?
-¿Dos edades?
-¿Cómo podemos tener dos edades?
-Esto es imposible!!
Si, si, espera, sigue leyendo.
Por un lado, tenemos la edad cronológica, la que marca tu DNI. Tu edad actual.
Esta ya la conoces.
Y estarás de acuerdo conmigo de que, por mucho que quieras, desgraciadamente esta edad es la que es y no la podemos cambiar.
Bien, pues Rocío descubrió que además de esa, tenemos otra edad que no es tan conocida, pero que, sin embargo, es la más importante para la fertilidad:
La Edad Biológica
Te explico de qué va.
De forma resumida, esta edad es un reflejo de los años que tiene tu cuerpo, tus células, tus óvulos…
Cuando hablamos de fertilidad, la edad biológica es la que realmente importa.
Porque, mientras la edad cronológica (la de tu DNI) NO la puedes modificar…
Tu edad biológica, la edad de tu cuerpo,
SI LA PUEDES MODIFICAR.
Y esto lo cambia todo.
¿Comprendes?
TODO.
Porque, puede que en tu DNI ponga que tienes 35 años, pero que tu cuerpo (y tus óvulos) realmente tengan 30.
Por eso hay mujeres con 36 años que son más fértiles que otras con 33.
¿Ves la importancia que tiene esto para tu fertilidad?
Esto significa que, tengas la edad que tengas, puedes hacer que tus óvulos sean MÁS JÓVENES y de MAYOR CALIDAD que los que tienes ahora.
Y esto, automaticamente, aumenta tus probabilidades de quedarte embarazada.
Cuando Rocío descubrió esto y vio que era algo que estaba a su alcance, y que dependía de ella, cambió por completo la forma en que afrontó la búsqueda de ahí en adelante.
Entonces… la pregunta del millón:
Rocío hizo algo que la mayoría (por desgracia) no hace.
Es algo tan sencillo como poderoso.
Actuó.
Se comprometió.
Y tomó las riendas de su fertilidad.
Con paciencia y constancia. Y luego, recogió los frutos.
Ahora lo verás.
Después de 3 meses mejorando su calidad ovárica, vio que su dolor menstrual había desaparecido, que tenía menos hinchazón premenstrual y mucha más energía…
Se sentía mejor en su cuerpo. Y no era su imaginación, eran sensaciones reales.
Su cuerpo había cambiado, y sus óvulos también.
Estaba preparada para intentarlo de nuevo.
Así que, fue a por la tercera y última FIV.
Digo última porque ya no concebía hacer más. Ni económica ni emocionalmente. Ya no podía más.
Ese era su último cartucho.
¿Los resultados?
Ahora voy, pero antes…
¿Te acuerdas de que en las dos rondas previas sólo le consiguieron sacar 1 óvulo a Rocío?
En dos extracciones, sólo 1 óvulo saludable.
Bien.
Pues esta vez, en una sola extracción, consiguieron sacarle 4 óvulos sanos, fuertes y saludables.
En una sola extracción consiguieron sacar 4 veces más óvulos que la suma de las dos anteriores.
Muy fuerte.
Eso de por si ya es un gran logro, pero es que además, Rocío hizo la transferencia con uno de esos óvulos saludables y…
¡Se Quedó Embarazada!
Imagínate, fue tan bien que incluso le sobraron 3 óvulos saludables que guardó para el futuro.
Piensa en esto por un momento:
Hacía sólo 3 meses les habían dicho que “no había nada que hacer”, que tenían una reserva ovárica baja, que “sus óvulos no servían”, que su única opción era la ovodonación…
Y ahora, en este mismo momento que tú estás leyendo estas líneas, Roció disfruta sintiendo cómo su bebé se mueve dentro de su barriga y crece día a día.
¿No es esto increíble?
Imagina todo el tiempo, sufrimiento emocional y derroche económico que se hubieran ahorrado si hubiesen sabido esto cuando empezaron la búsqueda.
Imagina qué diferentes hubiesen sido estos 2 años…
Se me ponen los pelos de punta.
Mira, hay una frase que me gusta transmitir a todas las mujeres que llevan tiempo en búsqueda cuando se dan cuenta de que podrían haber hecho las cosas mejor desde un inicio.
Normalmente sienten una mezcla entre frustración y culpa, y siempre les digo:
– Los errores que has cometido en el pasado sólo te sirven si te ayudan a tomar mejores decisiones en el presente.
Lo que quiero decir es que, no importa tanto lo que hayas hecho hasta ahora. No dejes que tus decisiones del pasado limiten tu futuro. Puedes cambiar de rumbo.
Si quieres estar más cerca de conseguir el embarazo en los próximos meses, ahora ya sabes lo que debes hacer.
Lo has visto en esta página.
Da igual la edad que tengas o la situación en la que te encuentres. O si buscas el embarazo de forma natural o por reproducción asistida.
Te puedo poner mil ejemplos más de mujeres con casos muy diversos que han conseguido el embarazo gracias a mejorar su calidad ovárica.
Y muchas de ellas incluso se han ahorrado hacer FIV.
Cuando haces lo que debes para mejorar la calidad ovárica, aumentas tus probabilidades de embarazo. Esto lo dice la evidencia científica y la experiencia clínica.
Y te aseguro que los resultados me sorprenden hasta a mi.
Que desde que inicié este proyecto en 2019 he podido comprobar que, haciendo los cambios necesarios, centenares de mujeres se han quedado embarazadas contra todo pronóstico.
E, independientemente del caso, un principio fundamental y prioritario siempre es…
Frenar el ritmo de envejecimiento celular.
Igual que hizo Rocío.
Igual que puedes hacer tú ahora.
Durante estos años, he comprobado repetidas veces cuáles son los hábitos que tienen mayor impacto sobre la fertilidad. Es un abanico amplio de prácticas con las que cualquier mujer puede frenar el envejecimiento de sus óvulos y acercarse al embarazo.
No es nada complicado o inalcanzable. Todo lo contrario. Lo vas a ver.
He decidido crear una MASTERCLASS SOBRE CALIDAD OVÁRICA para mujeres con ganas de involucrarse en su camino hacia la maternidad, independientemente de su edad o de si buscan el embarazo de forma natural o por FIV.
Todo lo que incluyo es contenido contrastado, científico y de alto valor. Y te ayudará.
He recibido muchos mensajes de agradecimiento de mujeres que desconocían por completo todo lo que cuento dentro y me dicen -y cito textualmente- que les “ha cambiado la vida”.
Aquí abajo te cuento más para que sepas todo lo que incluye.
En esta masterclass veremos:
Recuerda, tu edad biológica, la que realmente importa para tu fertilidad, la puedes modificar con todo lo que te cuento en esta MASTERCLASS DE CALIDAD OVÁRICA, que tiene dos vídeos y un PDF.
El primer vídeo dura 1 hora y 41 minutos.
El otro dura 1 hora y 37 minutos.
Y el PDF es una plantilla que llevo años usando en consulta y que te facilitará la vida a la hora de aplicar lo que vas aprendiendo.
Dedicando este tiempo por tu parte ya sabrás cómo rejuvenecer tus óvulos y aumentar tus probabilidades de quedarte embarazada en los siguientes ciclos.
Así de sencillo.
Si aplicas esta información, aumentarás tu fertilidad y fortalecerás la salud de tu futuro bebé, disminuyendo las probabilidades de que sufra malformaciones, problemas cardiovasculares o neurológicos, …
No sé si para ti esto es importante. Pero si lo es, sólo por eso, ya merece la pena la inversión.
¿Qué incluye la masterlcass?
Todo lo que debes saber sobre los últimos avances de la ciencia del “anti-aging” para la fertilidad. Información filtrada, aplicable y de alta calidad.
Incluye 8 estrategias prácticas y efectivas que te ayudarán a frenar el ritmo de envejecimiento de tus óvulos y a mejorar tu fertilidad. Desde cambios en tu alimentación hasta hábitos de vida que marcan la diferencia. Cada estrategia está diseñada para empoderarte y acercarte un paso más a tu sueño de ser madre.
No quiero exagerar, no hace falta exagerar. Te prometo que este es el taller más transformador y completo que he ofrecido jamás. El feedback que he recibido de los cientos de mujeres que ya lo han hecho es espectacular.
¿Cómo es el material?
Te lo he preparado en dos vídeos; uno de 1 hora y 41 minutos, y otro de 1 hora y 37 minutos. En realidad tenía que ser uno, pero fui añadiendo y añadiendo información de valor… y terminaron siendo dos. Mea culpa.
Además, incluye un PDF que es la plantilla exclusiva en formato de checklist para no olvidarte de ningún hábito que apoye tu fertilidad. Es una lista que te da seguridad de que estás haciendo todo lo que está en tus manos para obtener los resultados que estás buscando. Imprímela las veces que quieras. Te recomiendo 2 por página, se ve bien de tamaño.
¿Me sirve la masterclass si tengo menos de 35 años? ¿Y si tengo +40? ¿Y si busco el embarazo de forma natural?
Si, en todos los casos te sirve. Frenar el envejecimiento de tus óvulos y mejorar tu calidad ovárica es algo que aumenta las probabilidades de concebir a cualquier mujer, tengas la edad que tengas. El caso de Rocío es sólo un caso de éxito entre muchos, pero podría haber puesto otro.
Incluso si estás empezando la búsqueda ahora, y aún no has sufrido el estrés y frustración que supone no conseguirlo tan rápido como pensabas, te será extraordinariamente útil empezar a tomar estos pasos con tiempo.
Te aseguro que te puedes ahorrar muchos quebraderos de cabeza.
¿Cuándo podré acceder a esta masterclass?
En cuanto la compres, la recibes en tu mail al instante, y es tuya para siempre.
¿Qué precio tiene?
100€, un precio regalado por todo el contenido que incluye (y por todo lo que puede hacer para tu fertilidad, si lo aplicas).
Te dejo el botón aquí abajo por si quieres comprarla antes de que las suba de precio.
Algo que ocurrirá en breve.
*Impuestos incluidos.
PD: ¿Y si es verdad que frenar el ritmo de envejecimiento de tus óvulos realmente marca la diferencia para tu fertilidad? ¿Y si es esto lo que te está frenando ahora mismo? ¿Dejarás pasar seis meses más sin hacer nada diferente? ¿O un año?
Los avances de la ciencia del anti-aging son la gran oportunidad de nuestro tiempo, y puedes utilizarlos a tu favor.
Esta masterclass tiene TODO lo que necesitas para que puedas frenar el envejecimiento de tus óvulos, conseguir más óvulos saludables, y acercarte con más seguridad a tu sueño de ser madre durante los próximos meses.
En definitiva, ¿y si mejorando tu calidad ovárica te quedas embarazada?